Jorge Martín Frías exige claridad sobre el euro digital: «No vamos a sacrificar la privacidad ni la competencia»
Jorge Martín Frías, eurodiputado de VOX y miembro del Comité de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo, ha llevado esta semana a la Eurocámara —coincidiendo con la campaña audiovisual de VOX contra el euro digital, Euro digital 2045— su oposición frontal a la nueva imposición de la Unión Europea, promovida por populares y socialistas. Durante su intervención en sesión parlamentaria, el eurodiputado ha denunciado los riesgos sistémicos, la falta de precedentes exitosos y el sesgo intervencionista de un proyecto que, ha advertido, abre la puerta a la trazabilidad y no garantiza el mismo grado de privacidad que el efectivo.
Martín Frías ha recordado que el propio informe parlamentario reconoce que «ninguna economía equiparable a la europea está apostando por la emisión de una CBDC minorista» y que «todos los proyectos y pilotos de CBDC minorista que se han intentado han resultado ser un fracaso». Ante este escenario, ha planteado una primera pregunta: «Incluso si el sector privado no diese con una solución de pagos paneuropea: ¿Qué hace pensar al ponente que el euro digital tendría éxito y no fracasaría como lo han hecho el resto de proyectos de CBDC?».
En su análisis, el eurodiputado ha subrayado que la principal motivación para la emisión de un euro digital minorista y online es combatir el dominio de empresas privadas como Visa y Mastercard, lo que, a su juicio, representa una deriva intervencionista impropia de un modelo de libre mercado. «Visa y Mastercard son empresas privadas. Pensar que el sector público va a ser capaz de competir contra estas empresas me parece una estrategia más propia de la Unión Soviética que de una economía de mercado».
Por ello, ha interpelado directamente al ponente del informe: «¿Cree usted que, si finalmente se emite un euro digital minorista y online, éste será capaz de competir con empresas privadas, que pueden adaptarse de forma más rápida y eficiente a las condiciones del mercado? En caso de que crea que sí sería capaz, me gustaría que me explicase qué le hace creer tal cosa. En caso de que no lo crea, me gustaría que explicase por qué el informe deja abierta la puerta a que se emita un euro digital minorista y online a pesar de creer que no es el instrumento apropiado para competir contra Visa y Mastercard».
En materia de privacidad, Martín Frías ha alertado de que el sistema propuesto implicaría un modelo de cuentas para la gestión de pagos, lo que conlleva un nivel de trazabilidad incompatible con la confidencialidad del efectivo. «Se apuesta por un sistema de cuentas para el caso en que se emitiese una CBDC minorista. Esto abre la puerta a la trazabilidad y, por tanto, no permitiría garantizar la misma privacidad que el efectivo. Quisiera que me diese una respuesta clara: ¿cree el ponente que un euro digital de carácter minorista con anotaciones en cuenta, como el que se propone en el informe, garantizaría el mismo grado de privacidad que el efectivo?».
En este contexto, VOX ha reiterado su exigencia a la Comisión Europea y al Banco Central Europeo, que se frene el expediente del euro digital hasta que se someta a una evaluación de impacto independiente y pública. Entre sus condiciones, la formación plantea:
El blindaje del efectivo, con la prohibición expresa de su sustitución o penalización, ya sea directa o indirecta.
Un diseño privacy by default, que impida la identificación de las transacciones ordinarias y limite estrictamente el acceso a datos.
La prohibición de sistemas de puntuación social, controles de gasto por finalidad o límites discrecionales que condicionen la vida cotidiana de los ciudadanos.
La nueva campaña audiovisual de VOX , ya disponible en sus redes sociales, refuerza esta línea y plantea una defensa frontal del efectivo como garante de libertad y privacidad. La formación exigirá que cualquier paso hacia su sustitución sea sometido a referéndum en todos los Estados miembros, y anuncia nuevas iniciativas legislativas en el Parlamento Europeo para proteger el derecho de los ciudadanos a gestionar su economía sin interferencias ni vigilancia.
Fuente: https://www.voxespana.es/
